5 jul 2013

Capítulo 5: Should I Be Worried?

Untitled
Hoy estoy agradecida

Dicho esto, salí de casa dejando a los chicos solos en ella. ¿Habrá sido una buena idea?
En fin, ya da igual. Eric y yo ya estábamos de camino a un restaurante a cenar.
Eric: ¿Te apetece tomar una cerveza? -me miró fijamente. Yo no sé qué me pasó, pero me perdí en esos ojos grises tan perfectos...-
Tu: Claro -contesté alegremente, estaba feliz por volver a tener una cita-.
Seguimos andando hasta un restaurante que había en Londres. -nos pillaba cerca, la urbanización estaba a unos metros de la capital- Era muy grande y tenía pinta de ser lujoso, tenía una decoración "pirata" -por así decirlo- tenía un mástil en medio de la sala, el techo estaba diseñado como una brújula y el mostrador se parecía a una bodega de un barco pirata.
Nos sentamos en una mesa para dos, miramos la carta, todo era marisco o pescado... Vino el camarero, y tuvimos que pedir las bebidas.
Eric: Yo quiero una cerveza, ¿y tu _____ (tu nombre)? -me miró atento-.
Tu: Yo también quiero una cerveza, pero sin alcohol... -aparté mi mirada de sus ojos y miré al camarero-.
El hombre se fue a traernos las bebidas y nosotros mientras aprovechamos para elegir platos y hablar un poco.

Al rato el chico vino con las bebidas. Estaba seca, así que le di un trago. Me sentía incómoda de estar con él. A mi me gustaba, y no sabía si el sentía lo mismo...
En unos minutos el camarero vino a apuntar los platos.
Eric: Yo quiero una sopa de marisco con nueces, ¿y tu? - me volvió a mirar con esos ojos fulminantes-.
Tu: Pues yo un carpaccio de langosta -esta vez no le miré, lo que hice fue mirar a la gente que había sentada en otras mesas de al lado-.
El muchacho se volvió a ir, y esta vez si que hablamos de cosas nuestras.
Tu: ¿Qué tal tu día, Eric? -le miré-.
Eric: Bueno, como todos. ¿Y el tuyo? -me miró con ojos pícaros-.
Tu: Bastante bien. -sonreí-.
Eric: Oye, ¿quiénes eran los chicos que había en el salón cuando llegué? -me miró nervioso. Se notaba que le pasaba algo-.
Tu: Solo eran unos amigos, los conocí hace unos días... ¿por qué lo preguntas? -le miré extrañada-.
Eric: No, por nada. -Le dio un sorbo a su cerveza y miró hacia el mostrador-.
Me quedé callada. No supe que decir para continuar la conversación. Y como decía mi padre; "callate si no tienes nada mejor que decir".
Al rato vino el chico con los plato. -Que pedazo de platos- Le dí el primer bocado a la langosta y saboreé.
Tu: Está bastante buena la comida, ¿no te parece? -Pinché de nuevo la langosta para llevármela a la boca-.
Eric: Si. La comida que hacen aquí es exquisita. Por eso te traje aquí. -Me sonrió-.
Tu: -reí- Un detalle por tu parte.

Acabamos de cenar. Ninguno decía nada. El ambiente se hizo incómodo. Nos mirábamos pero no hacíamos por hablar.
Eric: El otro día me dijiste que no tenías novio, ¿verdad? -me miró cauteloso-.
Tu: Em... Si... -A ver que pasa ahora...-
Eric: Bueno, cuando te vi entrar en el Starbucks, sentí un flechazo... y bueno, por eso te invité a salir hoy. Quería saber si es igual al contrario... -Me miró nervioso. ¿Le digo que yo también sentí el flechazo? Uy. Que vergüenza...-
Tu: Pues... -me miró esperanzado- Yo también sentí un flechazo cuando salimos a dar una vuelta... -Sonreí. Listo. Lo dije. Que agusto me quedé...-.
 Eric: -Apareció en su rostro una sonrisa de oreja a oreja- No sabes lo que me alegra oírte decir eso... -se recostó en la silla-.

Salimos del restaurante. Nos dimos una vuelta. Me dolían los pies, pero me daba igual.
Llegamos a río Támesis. Allí nos fuimos a las torres de Londres. Una vista preciosa. Anduvimos por una de las aceras a los lados y nos paramos en el centro del puente.
Eric: -me rodeó por la cintura- Bonitas vistas. ¿no?
Tu: Si. Son preciosas. -Estaba dando una fiesta dentro de mi. No me lo creo, es la primera vez que me pasa algo así. En la primera cita. Imaginense como estoy :D-.
Eric: -Se acercó poco a poco hasta tener sus labios contra los mios. Después de unos segundos, los apartó. Se me quedó mirando un rato-.
Tu: ¿A qué ha venido eso? -Lo miré con ojos pícaros-.
Eric: ¿Qué pasa?, ¿es qué no puedo besarte?. Ahora eres mía -Se rió. Su risa era contagiosa, así que me la contagió y me reí con él-.
Tu: Por supuesto que sí. Toda tuya... -volví a juntar mis labios con los suyos. Esta vez estuvimos más tiempo que antes-.

Una vez que el beso terminó. Eric miró su reloj. Yo lo imité. Miré la hora en mi móvil. Eran las 23.03. Tenía que volver a casa. Mi padre podría haber llegado. Y si lo pillo con un mal día. Me puedo llevar la bronca.
Eric: Será mejor que te lleve a casa. -Encima tiene el detalle de acompañarme. Que majo es el tío-.
Tu: Si. Será mejor. -Comenzamos a andar en dirección por donde vinimos. Me sentía rara en el camino. El estuvo mirándome todo el rato y yo rezando para no encontrarme a mi padre allí aún. Que rara que soy. Me preocupo de las cosas cuando no debo-.

Llegamos a mi casa. Nos paramos en la entrada del jardín.
Tu: Hemos llegado. -Me dí la vuelta para tenerlo cara a cara-.
Eric: Bien. Buenas noches princesa. -Me volvió a besar-.
Tu: Que duermas bien, mi príncipe. -Ambos reímos y entré a casa con paso rápido por si acaso-.
Al entrar, encontré a los chicos exactamente en la misma postura que cuando me fui. Me acerqué al salón. Estaban fritos.
Tu: -susurrando- Madre mía.... -Me acerqué a Louis- Louis... Despierta...
Louis: Mmmm -movió la mano como si estuviese apartando una mosca-.
Tu: -me dirigí hacia Zayn- Zayn... Despierta... Es tarde... -Zayn simplemente imitó el gesto de Louis. Ahora probé con Niall. Pero no hizo nada. Siguió roncando como alma que lleva el diablo... Luego probé con Harry. El se movió sus rizos inconscientemente-. Dios. Vaya tíos... -Ahora probé con Liam-. Liam... Despierta... -Entreabrió los ojos y me miró-.
Liam: _____ (tu nombre) ¿ya llegaste?, ¿dónde estoy?, ¿qué hora es? -Uno dio señales de vida. Pero parece que tuvo un profundo sueño-.
Tu: Si, ya llegué. Estas en mi casa. Y son las... -miré el reloj de pared- 23.46.
Liam: Es tarde. Mejor nos vamos ya. -Se levantó del sillón- ¿Te vemos mañana? -Despertó a los chicos. De verdad vaya forma de despertarlos. Pataditas en las piernas y algún que otro pequeño manotazo en la cara-.
Tu: Claro. Mañana nos vemos. -Los cinco salieron por la puerta en fila-.
Todos: Hasta mañana _____ (tu nombre) -Acto seguido cerraron la puerta y suspiré. Que majos son estos chicos...-.

Subí a mi cuarto y me puse el pijama. Deshice la cama y me metí en ella. Miré al techo durante unos minutos. Traté de organizar lo que me pasó hoy, pero la puerta de la entrada se oyó y dejé de pensar.
A continuación, oí un grito de satisfacción y a alguien subir las escaleras a un ritmo cargado. Me asusté porque sabía quien era. Mi padre. Y venía borracho.
Oí mi puerta abrirse. Rápidamente cerré los ojos y me hice la dormida. Me destapó. Me buscó la muñeca. Me la atrapó y tiró de mi para levantarme. Me colocó delante suya aún cogida de la muñeca.
Tp: ¿Hacéndote la dormida? -Echaba olor a alcohol. En su voz se notaba también-.
Tu: ... -No supe qué decir. Sabía que dijese lo que dijese me iba a pegar. Igualmente no tengo los ojos de una recién levantada. Se notaba que no estaba durmiendo-.
Tp: -Me pegó un guantada en la cara-. ¿Crees que soy tan tonto como para no darme cuenta de ello?-.
Tu: -Intenté soltarme la muñeca, pero no me dejó-. ¿Por qué ahora? Estas discutiendo por algo que no tiene sentido...
Tp: -Me miró con mala cara- Porque vengo borracho. Ya me conoces. -Reía como un desquiciado, por el alcohol claro-.
Luego dejó de reír y me empujó. Caí al suelo. Se acercó a mi y comenzó a darme patadas por todos lados. No miraba donde caía la pierna. Pero si lo sentía.
Después de parar con las patadas, se acercó a mi.
Tp: -acercó su boca a mi oído- Shhh... -se fue y cerró la puerta-.
Ahí me quedé. En el suelo. Inmóvil.
Esperé unos minutos para asegurarme de que no volvería a entrar. Cuando pasaron esos minutos, no pude resistirme y comencé a llorar. ¿Qué vida me esperaba con mi madre enferma y mi padre alcohólico?. Me levanté dolorida.  Salí de mi cuarto y me asomé al suyo. Estaba dormido. Espatarrado en la cama. Aún vestido. Fui al baño a ver lo que me había hecho. Tenía unos pequeños cortes en el labio inferior. La nariz me sangraba un poco y tenía ciertas zonas de los brazos y el vientre doloridos. Cogí una toalla mojada y me quité los restos de sangre. A continuación, me dirigí a mi cuarto a dormir de una vez por todas, y descansar un poco para mañana. Pero no conseguí conciliar el sueño. Pero el cansancio me venció, y me dormí.

(Al día siguiente)

Me desperté. Quité las sábanas de encima mía y me levanté. Me fui a la ducha. Al quitarme en pijama vi moratones en mis brazos y mi vientre. -Normal con la que me cayó anoche-. Me dí una ducha con pelo y me lié en la toalla para ir a mi cuarto a cambiarme.
Abrí el armario pensativa y busqué algo para ponerme. Hoy estaba nublado y opté por algo de entremés:

So fly away - Polyvore

Bajé a la cocina, no había nadie. Mi padre seguía durmiendo. Me preparé el mismo desayuno de siempre y tranquilamente me lo tomé. Al terminar subí a mi cuarto y cogí mi bandolera. Bajé a la entrada cogí las llaves, algo de dinero y salí en dirección a la universidad.
En ella tuve mi horario de clases. Mi almuerzo y estuve un rato charlando con Eric. Me volvió a invitar. Pero esta vez era para mañana, pasar la tarde con el en su casa.
Volví a casa y volví a comer sola. Mi padre se tuvo que ir antes a trabajar otra vez. Después de comer, reposé la comida viendo un poco la tele y cuando se me hicieron las 16.30 decidí ir a visitar a mi madre al hospital, ya que ayer no tuve tiempo de ir con lo de la cita y que los chicos vinieron.

Salí de casa y fui al hospital. -Tampoco quedaba lejos. Esta vez llevaba botas planas y no me dolerían los pies a mitad de camino como otras veces- Entré y en recepción me dieron la sala y la planta en la que se encontraba. Subí las escaleras hasta la 4º planta y allí busqué la habitación 357.
Entré, y allí estaba mi madre. Tumbada en la cama. Inmóvil y con los ojos medio cerrados. Me acerqué a ella y poco a poco giró mi cabeza hasta poder contemplarme. Su rostro era pálido y tenía un brillo apagado en los ojos.
Tm: Hola cielo... -Su voz sonaba ronca y apagada-.
Tu: Hola mamá. ¿Cómo estás? -me senté en una silla que había al lado de su cama-.
Tm: Pues... -cerró los ojos y a continuación volvió a abrirlos- Bastante mal...
Tu: -Me quedé callada. ¿Qué digo ahora?, no es fácil decir algo en estos momentos....-  Yo... Em...
Tm: -Rió- No hace falta que digas nada. -Me echó una sonrisa sincera-.

Estuvimos varias horas hablando. Le dije que papá anoche vino borracho, que me eché novio, que había conocido a 5 amigos... y ella me dijo su rutina en el hospital y que hace unos días quitó dinero de la cuenta de mi padre y la metió en la mía. Me dijo la contraseña, ya que también la había cambiado. Y me dijo que tuviese cuidado con él.

Al rato mi madre me pidió que me fuese. Se encontraba muy mareada. Y como buena hija que soy, la dejé descansar. Antes de salir del hospital, le dije a la enfermera que si pasaba cualquier cosa que me llamasen -cuando mi padre la ingresó le dio varios números de teléfono en caso de urgencia-. Salí del hospital un poco preocupada.
Al llegar a casa, me desplomé en el sillón y puse la tele. Al rato sonó mi teléfono: Zayn.

--------------------------------------------------Conversación--------------------------------------------
Zayn: Hola _____ (tu nombre), ¿estas libre ahora? -se oían risas de fondo-.
Tu: Si. ¿Por qué?
Zayn: ¿Podemos pasar por tu casa? -se notaba que él también se estaba riendo pero se lo estaba aguantando como podía-.
Tu: -Dudé un rato- Claro...
Zayn: Genial. En unos minutos estamos allí. -Las risas aumentaron. Me empecé a mosquear porque pensaba que me estaban haciendo una broma-.
Tu: Por supuesto. Aquí os espero. -Colgué y me crucé de piernas en el sillón-.
------------------------------------------------Fin de la conversación------------------------------------

Nada más colgar sonó el timbre. Me levanté y abrí la puerta. Al abrir me encontré con los chicos riendo -Ya sé por qué se reían mientras hablaba con Zayn-. Los invité a entrar y todos nos sentamos en los sillones. Estuvimos hablando y riendo por unos minutos, hasta que mi móvil interrumpió la conversación.

---------------------------------------------------Conversación-------------------------------------------
Tu: ¿Si? -Pregunté extrañada-.
****: Llamo del hospital. -Mi cara de curiosidad se convirtió en cara de pánico. A eso, se le sumó las miradas preocupadas, y al mismo tiempo intrigadas de los chicos-.
Tu: ¿Qué pasó? -Mi pánico aumentaba por momentos-.
****: Es sobre su madre... -La voz del hombre que me hablaba se transformó a un tono más serio-.
Tu: ¿Qué le ha pasado? -Mi pánico no se iba. Estaba ya para un ataque al corazón-.

-------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Holaaaa! :)
Espero que este capítulo no se haya hecho aburrido. En el capítulo 3 recibí un comentario anónimo diciendo que era super aburrida, y he intentado no hacerla tan aburrida. Espero haber hecho buen trabajo.
Solo quería deciros, que a partir de este capítulo, empieza el argumento principal de la historia.
Muchas gracias por leer y comenten sobre qué os pareció. c:

3 comentarios:

  1. Me encanta tu novela, y de lo que es aburrida yo no lo veo así, lo que pasa ahora esque este capitulo me ha dejado más introgada que de los otros ¿que le habrá pasado a su madre?
    Siguela y sube el proximos capitulo pronto. :3

    ResponderEliminar
  2. Si la amoo enserio siguela sube el cap. Pronto ahhh amo a estos chicos oh & te amo a ti por escribirla y hacerme soñar.xx by:Samantha

    ResponderEliminar
  3. Se ve un pocito....horrible que diga anonimo,asi que soy Samantha xx

    ResponderEliminar